Normativas ISO 14001: demuestra el compromiso ambiental de tu empresa
La norma UNE-EN ISO 14001 es una herramienta que permite integrar el medioambiente en la gestión global de la empresa. De este modo, las organizaciones que optan por implementar un Sistema de Gestión Ambiental (SGA), según la ISO 14001, sistematizan, de forma sencilla, los aspectos ambientales de las actividades que se desarrollan en la compañía. Además, favorecen la protección ambiental y, al mismo tiempo, promueven un equilibrio con los aspectos socioeconómicos.
A continuación, te contamos cuál es la importancia de las normativas ISO 14001, su proceso de certificación y el papel que juega en la integración y sistematización de la gestión ambiental en el ámbito empresarial.
¿Qué es la certificación ISO 14001 y para qué sirve?
Las normativas ISO 14001 son un estándar internacional que establece los requisitos para un SGA. Pertenece a la familia de normas ISO 14000, un conjunto de directrices internacionales publicadas por la Organización Internacional de Normalización (ISO) que cubre aspectos relacionados con las prácticas medioambientales, los estándares de calidad de los productos y la gestión general de las organizaciones.
En este sentido, las normativas ISO 14001 son aplicables a cualquier organización, independientemente de su sector o tamaño, que, de manera voluntaria, desee reducir su impacto en el medioambiente y cumplir con la legislación en materia ambiental.
Los requisitos o principios básicos de las normativas ISO 14001 son:
- Compromiso de la alta dirección en el establecimiento de una política ambiental.
- Planificación para lograr los objetivos ambientales fijados. Se deben identificar los riesgos y las oportunidades ambientales, así como establecer objetivos y metas alcanzables y medibles.
- Implementación de los planes establecidos. Se centra en la ejecución de los procesos y, además, tiene en cuenta la capacitación del personal, la comunicación interna y externa, y la documentación adecuada de procedimientos y resultados.
- Medición y evaluación del rendimiento. Las decisiones deben basarse en el análisis de datos y en la valoración objetiva de la información en relación con el desempeño ambiental.
- Revisión de la gestión y mejora continua. La organización debe comprometerse a explorar nuevas vías de mejora ambiental e implementar acciones preventivas y correctivas.
Normativas ISO 14001:2015: ¿qué debes saber de la última versión?
La última versión de las normativas ISO 14001, publicada el 15 de septiembre de 2015, introdujo algunas modificaciones. Entre las más significativas, podemos encontrar las siguientes:
- Enfoque basado en el ciclo de vida de los productos y servicios: considera los aspectos ambientales relacionados con los productos y servicios en todas las etapas, desde la adquisición de materias primas hasta la disposición final.
- Gestión de riesgos: identifica los riesgos ambientales significativos asociados con las operaciones y toma las medidas correspondientes para evitarlos o mitigarlos.
- Mejora del desempeño ambiental : busca oportunidades para avanzar más allá del cumplimiento de los requisitos legales.
- Estructura de alto nivel: posibilita la alineación del SGA con otros estándares de gestión ISO, como aquellos relacionados con la calidad, la salud o la seguridad ocupacional.
Además, se añadieron ciertos términos para que todos los involucrados compartan un marco común de referencia. Entre estos conceptos, destacan:
- Partes interesadas: las normativas prestan atención a la identificación y gestión de las personas o grupos que pueden afectar o ser afectados por las decisiones o actividades de la organización, como, por ejemplo, los clientes o proveedores.
- Comunicación ambiental: este nuevo término se refiere a la información relevante que la empresa aporta y recibe en relación con su SGA. Esto implica tanto la divulgación de información por parte de la organización sobre sus prácticas ambientales, objetivos, logros y desafíos, como la recepción de comentarios, sugerencias y preocupaciones de las partes interesadas externas e internas
- Desempeño ambiental: son los resultados medibles de las actividades de una organización que reflejan su compromiso y efectividad en la gestión de aspectos ambientales, tales como emisiones, consumo de recursos y residuos generados.
Los tres pilares de sostenibilidad de las normativas ISO 14001
Las normativas ISO 14001 tienen por objetivo lograr un equilibrio entre los tres ejes o pilares de la sostenibilidad: el medioambiente, la sociedad y la economía. Por este motivo, el enfoque de este estándar internacional trasciende la gestión ambiental, ya que integra consideraciones clave de responsabilidad social y de economía en las operaciones de la organización.
Para conseguir este enfoque integral, se pone énfasis en considerar los factores internos y externos que puedan influir en la capacidad para equilibrar la rentabilidad, el bienestar social y la sostenibilidad ambiental. Por ejemplo, es importante examinar el nivel de capacitación del personal para implementar las acciones planificadas. También se debe tener en cuenta las expectativas de las partes interesadas externas, ya que es necesario comprender cómo las acciones resonarán en el entorno empresarial y social.
Beneficios de la implementación de las normativas ISO 14001
Las principales ventajas para las empresas de adoptar un Sistema de Gestión Ambiental de acuerdo con la norma internacional ISO 14001 son las siguientes:
- Cumple con las obligaciones legales: implementar esta norma asegura que la organización cumple con los requisitos legales aplicables en materia ambiental y, en consecuencia, evita posibles sanciones.
- Gestiona el impacto ambiental: se adoptan prácticas que minimizan la contaminación y optimizan la gestión de recursos y residuos.
- Aporta beneficios económicos: una gestión más efectiva ayuda a disminuir los costes. Además, se evitan sanciones por incumplimiento de las normativas ambientales.
- Fomenta la Responsabilidad Social Corporativa (RSC): impulsa la percepción positiva de la empresa entre los clientes y la sociedad en general e inspira confianza en el negocio.
- Garantiza el cumplimiento de la legislación vigente y de los requisitos legales.
- Estimula la participación interna: al fomentar la comunicación y la formación. Además, impulsa la contribución activa de todos los equipos en la gestión ambiental de la organización.
- Promueve la mejora continua: se optimizan los procesos, el rendimiento y la eficacia de la organización a lo largo del tiempo.
- Otorga puntos adicionales en licitaciones: si bien la Ley de Contratos del Sector Público no exige a las empresas contar con certificaciones ISO para acceder a licitaciones y contratos públicos, el órgano de contratación puede emplearlo como un requisito de solvencia técnica o como un criterio de adjudicación. Esto se debe a que la ISO 14001, en particular, ayuda a identificar y minimizar los impactos ambientales que pueden producirse durante la ejecución del contrato público.
- Facilita la integración de sistemas: se alinea con otras normas de Sistemas de Gestión de Calidad, como ISO 9001, ISO 45001 u OHSAS 18001 de seguridad y salud laboral.
- Amplía tus posibilidades comerciales: al ser unas normativas reconocidas en el ámbito internacional, brindan la oportunidad de explorar nuevos mercados y atraer a clientes que aprecian el compromiso medioambiental.
Cómo implementar y certificar las normativas ISO 14001
La implementación de las normativas ISO 14001 es una tarea compleja que requiere el compromiso y la participación del personal de la organización.
Se desarrolla en varias etapas y, dentro de estas, en múltiples actividades hasta llegar a la certificación. Dichas etapas y actividades pueden resumirse en cuatro pasos clave:
Etapa 1: Implementar el SGA
Antes de iniciar el proceso de certificación según las normativas ISO 14001, la empresa debe integrar el Sistema de Gestión Ambiental. Para ello, analiza los requisitos de la norma y coteja que los objetivos, los procesos y sistemas de evaluación del SGA están alineados.
Ten en cuenta que, para garantizar una implementación efectiva, es importante llevar a cabo programas de formación y sensibilización de los empleados. Además, necesitarás mantener un control de los ajustes y actualizaciones del SGA.
Etapa 2: Elegir un organismo certificador
Una vez que hayas implementado el SGA, el siguiente paso es elegir el organismo de certificación idóneo. Para ello, han de considerarse aspectos como:
- La acreditación para auditar la ISO 14001.
- La experiencia.
- La reputación o reconocimiento.
- Los tiempos de espera.
- Las tarifas.
- Los requerimientos para la certificación.
En esta etapa, deben recopilarse algunos documentos y registros. Asimismo, es necesario realizar auditorías internas previas a la auditoría de certificación. También se llevan a cabo revisiones de la gestión para identificar aspectos a mejorar.
Etapa 3: Auditoría de certificación de la etapa 1
Los auditores externos revisan la documentación del SGA y determinan el grado de cumplimiento con los requisitos de las normativas ISO 14001. De aquí, se obtiene un informe con los errores y no conformidades que podrían afectar el proceso de certificación.
Paso 4: Auditoría de certificación de la etapa 2
En esta etapa, los auditores evalúan que el SGA funciona según las especificaciones y condiciones normativas. Cuando confirman que este cumple con los requisitos, emiten una certificación que indica que la organización cumple con las normativas ISO 14001.
Con el fin de mantener y verificar la mejora continua del sistema, se tendrá que realizar auditorías de seguimiento.
Demostrar y apostar por el compromiso ambiental con las normativas ISO 14001
Cumplir con la regulación ambiental, además de reducir y optimizar el consumo de energía, son objetivos que se plantean las empresas que implantan un SGA basado en las normativas ISO 14001. De hecho, en la cláusula 6 (“6.1.2 Aspectos Ambientales”) se contempla este punto, ya que considera el “consumo de energía” como uno de los aspectos ambientales “susceptibles de ser controlados y sobre los que la organización tiene influencia”.
De esta forma, el consumo energético se incorpora en la práctica como un aspecto de la gestión ambiental que debe ser controlado y reducido, o bien como parte de un objetivo ambiental. Este enfoque ayuda a preservar los recursos y disminuir los costes asociados.
Además, para lograr la optimización del consumo energético con la ISO 14001, es clave que las empresas inicien el proceso de transformación digital.
En Cuerva compartimos 80 años de experiencia y conocimiento con otras empresas e industrias, ofreciendo soluciones que buscan optimizar el consumo de energía y minimizar el impacto ambiental: desde la implementación de sistemas inteligentes para la automatización de procesos hasta la instalación de sistemas de gestión de energía o EMS.
Colocando a tu empresa y a tus clientes en el centro, estamos aquí para acompañarte en la búsqueda de soluciones que te ahorren costes a la vez que integren una perspectiva ambiental en la visión global de tu empresa. La experiencia en nuestro sistema de gestión integrada (SGI), certificado desde el año 2013 por la UNE-EN ISO 14001:2015, así como por otras normas como la UNE-EN ISO 9001:2015, ISO 50001:2018 e ISO 45001:2018, nos respalda en nuestro compromiso con la excelencia y la sostenibilidad.