Qué es el mantenimiento eléctrico industrial y qué incluye

¿Sabías que las empresas que ponen en práctica planes de mantenimiento eléctrico de forma periódica han llegado a ahorrar hasta un 40% de su presupuesto? De hecho, el mantenimiento eléctrico industrial es esencial para la productividad y eficiencia de la actividad, pero también es muy importante para evitar fallos eléctricos que podrían afectar a la salud de los trabajadores y poner en riesgo toda la infraestructura física de la organización.

Por esta razón, teniendo en cuenta su eficacia, no debes olvidarte de la importancia del mantenimiento eléctrico industrial para el buen desarrollo de tu actividad empresarial. En este artículo, te contamos todo lo que debes considerar para desarrollar una buena estrategia para tus instalaciones y de qué manera contribuye a mejorar el ahorro en tu negocio.

¿Qué es el mantenimiento eléctrico industrial?

El mantenimiento eléctrico industrial engloba todas las prácticas y tareas que persiguen asegurar el correcto funcionamiento de las instalaciones eléctricas, maquinarias y otros sistemas en una organización.

Dentro del mantenimiento eléctrico industrial, se incluye la monitorización, revisión, asesoramiento en cuanto a mejoras y prevención de los fallos, además de las propias reparaciones que sean necesarias. De hecho, es esa parte de prevención y predicción la que hoy en día cobra más importancia, ya que permite reducir costes, tiempos de parada y accidentes inesperados.

Tipos de instalaciones eléctricas industriales

Antes de conocer qué tipos de mantenimiento eléctrico industrial existen y su importancia, resulta fundamental aclarar que dentro de una organización pueden convivir diferentes tipos de instalaciones eléctricas. Se trata de circuitos de electricidad que distribuyen la corriente eléctrica desde el punto de partida hasta el último punto de salida eléctrica. De acuerdo con su tensión, pueden clasificarse de la siguiente manera:

• Instalaciones eléctricas de alta y media tensión: son las instalaciones de mayor potencia y normalmente se emplean en la industria. Es obligatorio que cuenten con un contrato de mantenimiento anual firmado por una empresa habilitada. Además, también tienen que pasar una inspección reglamentaria por un Organismo de Control Autorizado (OCA) cada tres años por un organismo externo. Estas inspecciones se rigen por la Ley 21/1992 y por el Reglamento de la Infraestructura para la Calidad y la Seguridad Industrial.
• Instalaciones eléctricas de baja tensión: son las más habituales y normalmente se usan en hogares, oficinas, comercios, etc. Las instalaciones eléctricas con proyecto previo o legalizadas con potencia de 100 kW o más, están obligadas a pasar una OCA cada 5 años por un organismo externo.
• Instalaciones eléctricas de muy baja tensión: son las menos frecuentes tanto en la práctica industrial como en los hogares, dado que la potencia máxima es inferior a 24 voltios y no se pueden utilizar electrodomésticos con potencias altas.

Tipos de mantenimiento eléctrico industrial

Según el grado de incidencia o posible avería que se produce en una instalación eléctrica, diferenciamos tres grandes tipos de mantenimiento eléctrico industrial:

• Mantenimiento eléctrico predictivo: se realiza un estudio de las instalaciones para predecir cuándo van a producirse los fallos y, por tanto, adelantarse antes de que se produzcan. Para la detección temprana, se miden parámetros como vibración, temperatura, conductividad, horas de uso, etc. El mantenimiento predictivo asegura que el equipo solo se detenga ante un posible fallo grave. Esto supone una reducción de los costes operativos, el tiempo de inactividad y mejora el rendimiento general de la instalación.
• Mantenimiento eléctrico preventivo: se hace día a día para evitar que se produzcan fallos en el sistema, para así mejorar su rendimiento. A diferencia del anterior, en el mantenimiento preventivo no se hace ningún estudio para averiguar cuándo se va a producir el fallo, sino que de forma sistemática se ejecutan tareas de cuidado para alargar la vida útil y el funcionamiento de la maquinaria e instalaciones. Este tipo de mantenimiento contribuye a que la valoración sea favorable cuando la OCA realiza una inspección.
• Mantenimiento eléctrico correctivo: es aquel que se lleva a cabo cuando es necesario arreglar una incidencia o avería, es decir, una vez que el fallo o el problema ya se ha producido. También aplica cuando la OCA detecta defectos en las instalaciones.

¿Qué incluye y cómo hacer un mantenimiento eléctrico industrial efectivo?

A continuación, te detallamos los principales pasos a seguir y las actividades que se incluyen en un mantenimiento eléctrico industrial:

Evaluación y planificación del mantenimiento

En primer lugar, se deben clasificar los equipos eléctricos según su importancia, con el objetivo de identificar los activos críticos para someterlos a más revisiones periódicas. Asimismo, se deben revisar los registros de mantenimiento anteriores para establecer patrones de fallos y problemas recurrentes.

Con el objetivo de programar e integrar trabajos de mantenimiento eléctrico de forma periódica, se procede a diseñar un plan de mantenimiento que incluye su calendarización, los técnicos asignados, los costes, las instrucciones y todos los procedimientos, como las pruebas eléctricas específicas para cada equipo, la limpieza, la lubricación, la recalibración, etc.

Inspección y control

Este proceso del mantenimiento eléctrico industrial tiene que ver con la realización de pruebas y verificaciones periódicas con equipos de prueba especializados para garantizar que los equipos y sistemas eléctricos cumplan con los estándares de seguridad y funcionamiento establecidos. Entre ellas, podemos destacar las siguientes:

1. Inspecciones visuales: este es el primer paso del mantenimiento eléctrico industrial. Consiste en una revisión visual exhaustiva de los equipos eléctricos, como paneles de control, cuadros eléctricos, conductores, conexiones, interruptores, transformadores, motores, entre otros. Con esto, se busca identificar signos de desgaste, daños, corrosión, sobrecalentamiento o cualquier otra anomalía visual que pueda indicar un posible fallo o problema eléctrico.
2. Pruebas eléctricas: se ejecutan pruebas eléctricas, como la medición de voltaje, corriente y resistencia, para asegurarse de que los sistemas funcionen dentro de los parámetros establecidos.
3. Pruebas de resistencia de aislamiento: se realizan pruebas de aislamiento para identificar posibles problemas en los cables y conexiones.
4. Termografía: se utilizan cámaras termográficas para identificar puntos calientes que puedan indicar problemas de conexión o sobrecarga, ya sea por defectos de instalación, conexión o uso, así como por fallos presentados a lo largo del tiempo. En este análisis, se establece la comparación entre un índice de temperatura normal (dependiendo de los equipos) y un índice de temperatura crítica.
5. Análisis de vibración: buscamos detectar desequilibrios y un desgaste prematuro en motores y equipos rotativos que puedan conducir a problemas como, por ejemplo, desajustes en las bornas eléctricas.
6. Pruebas de Corriente Continua (DC): para motores DC, se realizan pruebas puntuales como la medición de la resistencia del devanado y la integridad del conmutador.

Tras llevar a cabo estas actividades de inspección y control, en caso de encontrar equipos que presentan fallos, se procede con acciones correctivas para reemplazar los componentes defectuosos o desgastados y hacer así las reparaciones necesarias.

Por el contrario, si en esta fase del mantenimiento eléctrico industrial no se encuentran fallos ni se detecta ninguna posibilidad de que estos ocurran en un futuro próximo, se procede con una limpieza regular de los equipos para evitar una acumulación de polvo y suciedad que puedan causar problemas eléctricos. De igual manera, se lubrica los equipos, según las especificaciones del fabricante, para asegurar su correcto y eficiente funcionamiento.

Registro y documentación

Tras efectuar estas pruebas, se registran los resultados para mantener un historial de desempeño. Por otro lado, es importante mantener una documentación precisa y actualizada de todas las actividades de mantenimiento realizadas, incluyendo registros de inspecciones, pruebas, reparaciones y actualizaciones.

Formación y mejora continua

Es importante evaluar periódicamente la eficacia del plan de mantenimiento en función de los resultados, tiempos de inactividad y reducción de fallos, con el objetivo de ajustarlo y mejorarlo de forma constante. En este sentido, se debe tener en cuenta la instalación de dispositivos más eficientes, la actualización de firmware o software, la implementación de nuevas tecnologías o la modificación de la configuración para mejorar el rendimiento, la eficiencia energética en la industria o la seguridad.

Por otro lado, resulta fundamental proporcionar formación adecuada a los técnicos y personal involucrados en el mantenimiento eléctrico industrial.

¿Cuál es la importancia del mantenimiento eléctrico industrial?

Toda actividad productiva depende de forma importante de la electricidad. Cuando hay un fallo o un corte que produce una parada o un mal funcionamiento en la línea de producción, las consecuencias son cruciales: retrasos en entregas, problemas operativos para volver a poner en marcha, pérdidas por fabricación defectuosa, etc.

Un buen trabajo y planificación a la hora de realizar un mantenimiento eléctrico industrial es, por tanto, fundamental, no solo para asegurar la producción, sino para cuidar la salud de los trabajadores y la integridad de los activos. A continuación, algunas de las principales razones por las que es importante realizar un buen mantenimiento eléctrico industrial son las siguientes:

• Mejora de la productividad: el mantenimiento ayuda a tener controlada la operatividad de la empresa y evita que se produzcan paradas no previstas, que son uno de los elementos que más ineficiencia añade a los sistemas productivos.
• Reducción de los costes: las paradas no programadas tienen un coste importante para las empresas, al que, además, hay que sumar las reparaciones o pérdida de equipos por no hacer un mantenimiento eléctrico industrial adecuado o a tiempo.
• Ahorro energético: cuando una máquina o instalación no funciona adecuadamente, puede consumir electricidad por encima de lo normal. Esto supone un aumento de los costes energéticos, algo que ya de por sí suele ser elevado en la industria.
• Optimización de las instalaciones y equipos: las tareas de mantenimiento eléctrico industrial facilitan que se pueda detectar oportunidades de mejora en las instalaciones y maquinarias, lo que promueve la mejora continua de las instalaciones y equipos.
• Seguridad de los trabajadores: el mantenimiento es fundamental para evitar accidentes como choques eléctricos, cortocircuitos, quemaduras, incendios o explosiones que pueden suponer pérdidas o lesiones humanas.

Claves para realizar un buen mantenimiento eléctrico industrial

Ahora que ya sabes la importancia de hacer un mantenimiento eléctrico industrial, es fundamental que este mantenimiento sea efectivo y eficiente. Para ello, un buen mantenimiento debe comenzar en un plano estratégico en la organización. Algunos consejos que debes tener en cuenta son los siguientes:

• Contar con los perfiles profesionales adecuados: debes contar con un equipo especializado que sea capaz de cubrir tareas tanto de reparación y mantenimiento como de monitoreo y análisis preventivo.
• Definir procedimientos para la inspección de equipos e instalaciones: es primordial que haya profesionales que inspeccionen toda la maquinaria y hagan las revisiones y los mantenimientos que sean necesarios para identificar fallos a tiempo, como fugas, deterioros o problemas de limpieza. De esta manera, se podrá actuar desde un principio y antes de que el problema tenga consecuencias más graves.
• Usar un equipo óptimo: debes contar con una maquinaria adecuada tanto para la reparación como para la protección de los trabajadores. Además de tener herramientas especiales como, por ejemplo, aparatos de análisis termográfico para reducir el riesgo de incendios, también puede mejorar la efectividad de las tareas de mantenimiento.
• Dotar de recursos económicos al mantenimiento predictivo: invertir en un buen plan de mantenimiento eléctrico industrial supone un ahorro en costes operacionales, ya que se preverán paradas no programadas, se alargará la vida útil de las instalaciones y maquinaria y, además, se evitarán accidentes que pueden causar daños a los trabajadores.

Asegúrate de contar con un buen mantenimiento eléctrico en tus instalaciones

Es el momento de dar un paso decisivo hacia la excelencia en tus operaciones industriales. Son muchas las razones por las que es necesario contar con una buena estrategia de mantenimiento, tanto en tus instalaciones eléctricas como si dispones de una planta fotovoltaica. En este mundo tan cambiante, cada engranaje de tu maquinaria cuenta, y es por eso que la elección de una empresa de mantenimiento de confianza se convierte en un pilar fundamental para el éxito.

Imagina un escenario donde los equipos funcionan a pleno rendimiento, sin miedo a sufrir interrupciones inesperadas. Eso es lo que en Cuerva podemos hacer por ti: una gestión de mantenimiento que no solo es profesional, sino también una garantía de seguridad y funcionalidad.

Por lo tanto, si buscas optimizar tus instalaciones de manera eficiente y segura, cumpliendo con los más altos estándares, la inversión en mantenimiento eléctrico industrial se presenta como una herramienta indispensable para desbloquear todo el potencial de tu empresa o proyecto.

En Cuerva, entendemos las complejidades de tu sector y estamos comprometidos a ser tus compañeros en el viaje hacia la excelencia. Llevamos más de ocho décadas cuidando de nuestras propias instalaciones e infraestructuras energéticas, algo que nos ha permitido convertirnos en expertos en el diseño, construcción, operación y mantenimiento de todo tipo de instalaciones en numerosas industrias y sectores.

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Publicado originalmente el 30 de marzo de 2023 y actualizado el 24 de agosto de 2023.